Se nos olvidó como ser (felices)
Hay una diferencia abismal entre decir: Un mango es el fruto de un árbol tropical, es de color rojo con amarillo y tiene forma de corazón
Versus
Con tus propias manos y boca probar un mango de verdad en algún lugar hermoso, y ojalá gratis.
La vida real es una experiencia que no se puede explicar.
Las palabras, los conceptos y las ideas, están para siempre separadas de la realidad, no se puede entender lo que no se ha experimentado.
A pesar de eso, sabios, santos, maestros y personas ordinarias han hablado por milenios del amor incondicional, la dicha absoluta, la libertad y la felicidad duradera.
Prueba que la conocen el hecho de que nos invitan a experimentarla.
Nos han dado métodos, pasos, consejos y hasta trucos. Pero más que nada, y dónde todos coinciden, es la dirección adecuada.
Ya sabemos que la felicidad, la verdadera satisfacción es hacia adentro.
Pero se nos olvida o no lo queremos aceptar y seguimos buscando afuera, encontrando pura insatisfacción, cansancio y sufrimiento.
Ilusión/decepción/ilusión/decepción.....
Los deseos son ilusiones que nos atrapan una y otra vez en una espiral descendente, consumiendo vida y devolviendo nada. Si tan solo supiéramos que somos lo que estamos buscando. Que ser feliz no es otra cosa que ser uno mismo/a.
Y que para ser uno mismo no hay que hacer nada. Y que para hacer nada hay que dejar de hacer, hay que parar completamente para darnos cuenta de la verdad.
Entonces:
La felicidad es la experiencia de ser uno mismo/a, está aquí y ahora y se logra, siendo no haciendo.
Si practicamos el silencio y la quietud, si dejamos de pensar y empezamos a sentir, eventualmente será más fácil ser nosotros mismos que perseguir quién sabe qué ideal, inventado por quién sabe quién, con quién sabe que intención.
Te invitamos a ver el satsang completo sobre la felicidad. |
Comentários